Según un reciente estudio, las empresas españolas que apuestan por la transformación digital de su negocio, incrementan sus ventas en un 39% más, que en países como Francia, Alemania o Reino Unido.

Al igual que durante finales del siglo pasado, cuando España registró un rápido desarrollo económico y modernización, ahora nuestro país tiene la oportunidad de situarse como ejemplo de éxito y rapidez en la integración de las nuevas tecnologías en los procesos de negocio.

Además, un 78% de las empresas encuestadas señaló una mejora en su presencia digital, la diferenciación con su competencia y en la experiencia de sus clientes por lo que se demuestra que, introducir tecnología en los negocios aporta valor a la empresa. 

Este estudio se basa en el sistema de puntuación Digital Transformation Business Impact Scorecard (BIS) creado por Coleman Parkes. Está basado en una clasificación global de países y sectores económicos, según 14 indicadores clave de rendimiento que normalmente utilizan las organizaciones, para medir el impacto de la transformación digital en cuatro ámbitos: agilidad empresarial, crecimiento del negocio, foco en el cliente y eficiencia operacional.

En términos de agilidad empresarial, según el BIS, las empresas españolas registraron mejoras del 31% en el tiempo dedicado a la toma de decisiones. De igual forma, la transformación digital está siendo positiva en la relación con los clientes, consiguiendo mejorar la satisfacción del usuario y la retención en un 41% y un 33% respectivamente.

Las empresas encuestadas muestran una alta confianza en las inversiones digitales, considerando un 75% que está “algo o muy por delante” de sus competidores como resultado de las inversiones en esta materia. En este caso, las empresas españolas están por detrás de Francia (85%), pero por delante del Reino Unido, Holanda y Suecia, con un 66%.